martes, 19 de octubre de 2021

In Your Own Times: Coldplay, varados en el Espacio Exterior

Hola a todos, bienvenidos una vez más a In Your Own Times. Estamos aquí por una sola razón, y es el lanzamiento del noveno álbum de Coldplay, que llevamos esperando desde el 2019, dado que no quisieron hacer una gira para un álbum tan precioso como lo fue Everyday Life, pero estamos algo decepcionados con el resultado del álbum, aunque no tanto como cuando salió A Head Full of Dreams en el 2015. Estamos listos para reseñarlo, aunque no estamos tan optimistas en esta ocasion, así que, sin más preámbulos, vamos a proceder.

 

Music of the Spheres, Vol. 1. Un álbum conceptual que se queda varado en el espacio



El álbum fue anunciado con misterio, igual que todos sus lanzamientos desde siempre. Las señales aparecieron desde la era del Everyday Life. Después anunciaron con platillo y bombo al nuevo productor, Max Martin, famoso por hacer el grueso del pop comercial que tenemos, y por trabajar con Britney Spears, Ed Sheeran y Taylor Swift, y también misteriosos sonidos y caracteres aparecían por el mundo del internet. Crearon todo un concepto espacial, un sistema solar intergaláctico, un lenguaje para cada planeta y una historia por contar, que pintaba para ser algo más épico que la space opera presentada en Mylo Xyloto (2011), pero que no se le vio por ninguna parte. La primera advertencia fue el nuevo productor, y cuando alguien que no conoce bien el trabajo previo mete su cuchara, pasan cosas como las que ocurrieron en esta ocasión.

Tenemos un álbum con errores, a medias, con un concepto que pudo ser mucho mejor explotado, pero que se quedó en suspensión en el medio del espacio, en un desierto de pop genérico, con un oasis al final del camino, que por más lejos que quiso salir de la Tierra, insistió en quedarse. Tampoco es novedoso en el mensaje transmitido, pues Chris Martin insiste en creer en el amor, algo con lo que lleva ya bastante tiempo, y da la impresión de un estancamiento creativo. Ligeramente superior al A Head Full of Dreams, pero que falló en sus pretensiones iniciales y en su grandilocuencia. Algunos aciertos que tuvieron:

  • Se presenta una línea de space rock, tanto en las líricas como en lo que se presenta en momentos en algunas canciones.
  • Tomamos viejas canciones descartadas en eras anteriores, y retomadas en este concepto, con resultados que van de lo épico a lo decepcionante.
  • Coldplay se atrevió a experimentar con el shoegaze nuevamente.
  • A pesar de no aterrizar bien el concepto, casi todas las canciones están inmersas en la atmósfera sideral que planeaban inicialmente.
  • Jon Hopkins y Davide Rossi hacen su gala de presencia para crear las camas sintéticas y las secciones orquestales, respectivamente, salvando al álbum de lo que podría ser una completa catástrofe, pero en momentos perdiéndose en las capas y capas de sonidos presentes.
  • Básicamente se volvieron expertos en la creación de las capas de sonidos sintéticos y en el manejo de escalas musicales.
  • La parte visual y los videos musicales muy bien trabajados, haciendo buen uso de los hologramas y de los efectos especiales. ¡Están de película!

 

Ahora sí, la reseña canción por canción

El primer tema en aparecer es Music of the Spheres I, que nos da un intro de lo que nos depara el álbum. Totalmente atmosférico y espacial, sirviendo de introducción a la primera canción del álbum.


Higher Power musicalmente es olvidable. Posee una base de percusiones electrónica, con un bajo que resalta bastante, un sonido ochentero, en momentos new wave, alcanzando cierto clímax después del bridge. La letra tampoco es novedosa, pero en conjunto, la canción es movida, y si algo logrará es levantarte de tu asiento. No hay más.

Humankind llega como la segunda mejor canción del álbum, como algo glorioso llegado del espacio exterior, con vocoders que simulan voces alienígenas, nuevamente sonidos ochenteros, una cama de sintetizadores muy a lo The Who, creada por Jon Hopkins, viejo colaborador de la banda, destacando la guitarra electroacústica y las múltiples explosiones, una emoción que me recuerda a Charlie Brown (Mylo Xyloto, 2011) lanzada hace 10 años, y también a Life in Technicolor (Viva la Vida, 2008). Muy seguramente dará de qué hablar en los conciertos ¡Un temazo!

Seguimos con el interludio Alien Choir, nuevamente una inmersión en lo oscuro y lo profundo, como el soundtrack de Halo 2 (Martin O'Donnell & Michael Salvatori, 2004), para llegar a la tercera canción, que es toda una joya. Let Somebody Go es una colaboración preciosa con Selena Gomez. Suena en momentos a Up in Flames (Mylo Xyloto, 2011), y en momentos recuerda un poco a Elvis Presley, como ya sucedió con WOTW/POTP (Everyday Life, 2019), acompañada de un piano y sonidos metrónomos marcando el ritmo. Líricamente está fuera de lugar en el concepto del álbum, pero por sí sola, ofrece una maravillosa química entre ambas voces.

Coldplay con Jacob Collier y las chicas de We Are KING en el Global Citizen 2021


Seguimos con Human Heart, atmosférica y acapella. Una triple colaboración entre Jacob Collier y las chicas de We Are King. Contiene elementos de la música africana, elementos folk y una química estupenda entre todas las voces. La letra es la mejor del álbum, hablando de la humanidad que cada uno posee. Un tema corto, y en momentos parece sencillo, pero no lo es. De todo el álbum es la que se robó el corazón de muchos, incluyendo el mío.

People of the Pride es algo nunca visto en Coldplay, y data de las grabaciones del Viva la Vida. Contiene un riff agresivo y una base de batería progresiva, con momentos donde Guy Berryman brilla con el bajo. El sonido recuerda a U2 y también parecería que Jonny Buckland y Matt Bellamy se divirtieron un rato en el 2007 ó 2008, pues suena también a Uprising de Muse (The Resistance, 2009). Es un oasis de rock en medio de un desierto de pop sintético (y en muchos momentos genérico). Tercera mejor canción del álbum.

Byutiful (si, mal escrito, pa’ llegar a la chaviza) es algo totalmente sintético, y musicalmente un intento fallido de vocoders aliens, grabados por Chris Martin. En gustos es polarizada, pues la amas o la odias. Es una de las canciones donde Davide Rossi (viejo colaborador de la banda en las partes donde hay secciones de cuerdas) metió las manos, pero no se le escucha su grandiosidad por ninguna parte. Me recuerda mucho a las canciones de Andrew Applepie, conocido porque sus canciones son prácticamente de licencia libre y todos las usan como música de fondo en los videos de youtube.
 

Music of the Spheres II es un interludio pasable, olvidable, a medias y sin conexión aparente, con error en la transición hacia la siguiente canción. My Universe es el ganchito comercial del álbum, dado que es una colaboración con BTS. Las army llevan un mes vueltas locas con la noticia y la canción. Una vez más, sin aportar nada nuevo, pero con un ritmo totalmente dance, que gusta al oído y te hará ponerla on repeat hasta que se te derrita el cerebro y se te escurra con las orejas. La versión acústica tiene un outtro de piano que suena precioso, además del remix hecho por Guy Berryman, que es todo un malviaje y otorga un sonido muy a lo Apparatjik (la otra banda en la que colabora).

Infinity Sign ilusionó a muchos, pues creímos que sería la versión de estudio de Life is Beautiful, compuesta como regalo a México después del terremoto del 19 de septiembre de 2017 y estrenada en San Diego, California, pero de eso solo queda la cama sintética de Jon Hopkins y el olé olé olé de fondo. Posee una base de percusiones constante en su ritmo y un arreglo de piano. Cualquiera esperaría que apareciera algo más, pero también es una de las pocas y contadas novedades que ofrece el álbum. Recuerda un poco al shoegaze mostrado en Chinese Sleep Chant (Viva la Vida, 2008) tirándole también al dream pop. Nada más que decir, buen tema.

Coloratura es LA canción. Un cierre que sostiene un álbum que se quedó a medias en su concepto y en la composición, de una manera preciosa, épica, pulcra y con bastantes elementos que la convierten en una de las tres mejores canciones de toda la discografía. Davide Rossi se lució en las cuerdas, que hacen un intro magistral, y también un buen cierre. Está estructurada como una rapsodia, dividida en varias partes y con una enorme duración, que se siente corta a pesar de todo. Una atmósfera espacial y celestial envuelve todo el conjunto, acompañado hasta el final con el piano, con un riff glorioso del Sr. Buckland en el clímax, que recuerda al de Moving to Mars (Mylo Xyloto, 2011), y el piano al de Gravity (X&Y, 2005), manejando esa misma línea de rock espacial de esa gloriosa y épica era, y que te transporta directo a Marte. Muy probablemente inspirada en lo que Queen y Pink Floyd ya lograron, pero que Coldplay nunca se habían atrevido a hacer. El mejor tema del álbum, y decir eso es quedarse cortos.

 

Bien, una vez repasadas todas las canciones, analizadas, escuchadas, y también una vez que presentamos el resumen de la era, podemos llegar a la siguiente calificación.

 


Coldplay regresa el próximo año a nuestro país, anunciando hasta el momento 3 conciertos: en el Estadio BBVA de Monterrey, Nuevo León; el Estadio Akron de Zapopan, Jalisco; y el Foro Sol de la Ciudad de México. Espero de corazón que puedan conseguir sus boletos y puedan vivir la experiencia de asistir a un concierto de Coldplay, pues es toda una experiencia que recordarán toda la vida.

 


Esto es todo por el día de hoy, nos leemos la próxima.

Fin de la transmisión.

jueves, 29 de julio de 2021

In Your Own Times: Katy Perry, más sonriente que nunca

 
Katy Perry

Hola a todos, bienvenidos a un nuevo post, aquí en In Your Own Times. Esta vez estamos de manteles largos. Ha sido una semana un tanto extraña de verano, y decidí escuchar algo fuera de mis habituales playlists de Spotify mientras me volvía todo un experto en psicoterapia, y recordé que Katy Perry había lanzado un álbum que pasó algo desapercibido mientras todos hacíamos lo imposible para que no nos matara el virus, precisamente a inicios del verano pasado, y también me llegó una idea mientras veía el cuarto capítulo de la quinta temporada de glee. Mis queridos lectores, ¡habemus reseña!
 

Smile, un álbum para resistir y sonreir

Portada de Smile

Smile es el sexto álbum de Katy Perry, aquella mujer que revolucionó el mundo del pop allá por el 2010, donde todo se volvió fiesta y algodón de azúcar por todas partes. Recuerdo bien esa época, debido a que fue mi época favorita de la vida. Bueno, esa época quedó muy atrás, y podría pensarse que Katy Perry no tendría salvación alguna, después de los álbumes donde llegó a los más alto, Teenage Dream en el 2010 y cuyo legado llegó hasta el 2013; y Prism, el mejor álbum de su carrera, en mi (para nada) humilde opinión. Witness llegó en el 2017 y gustó a la tercera parte, pero no a las dos terceras partes restantes de fans, y significó un tropezón por las escaleras. No me gustó mucho, pero Katy apareció en mis audífonos y me dijo surprise, bitch! Y apareció Smile, discotequero, EDM y bastante alegre. 
 
Tuvo un ejército de productores, entre los que no está Max Martin (Poco habitual, pues ha producido la mitad de todo el pop actual), pero figuran nombres como Stargate (que ya han trabajado con Katy, y también con Rihanna, Coldplay, 5H e Icona Pop), Charlie Puth (muy querido en este blog) y Zedd (uno de mis DJ's favoritos de la vida).

Es un álbum alegre, fiestero, movido, bailable, disfrutable, etéreo y atmosférico casi en su totalidad. Esto último fue lo que me cautivó, pues adoro la música que te sumerge en el ambiente que quiere mostrarte. Las letras hablan de amor, resiliencia (la capacidad de superponerte a las situaciones difíciles y complicadas de la vida) y el empoderamiento. Después de un embarazo y un divorcio, y de enamorarse de Orlando Bloom, era de esperarse un álbum tan genial. Vamos a darle un vistazo a lo mejor.

Las mejores canciones del álbum

Es difícil seleccionar las mejores, pues el álbum no es un sube y baja, sino que la energía se mantiene casi constante en cada canción, sin embargo, te daré un recorrido, en orden de aparición, de las mejores canciones del álbum.


Never Really Over es la primera canción, que llega arrasadora. Producida por Zedd presenta elementos de sus últimos singles, especialmente de Get Low (Zedd feat. Liam Payne, 2017) y su característico sonido de reloj de cuerda corriendo, una atmósfera envolvente y un coro que difícilmente saldrá de tu cabeza. Katy canta sobre un amor supuestamente terminado y superado, pero que se vuelve a manifestar en ella, pues realmente eso nunca terminó. La segunda mejor canción del album, ¡un temazo!

Cry About It Later es una auténtica fiesta de verano. Mantiene un ritmo casi constante y una letra que invita a llorar después, ahora toca beber y festejar, o el mundo se va a acabar. Presenta un riff de guitarra en el bridge de la canción. No suena a nada que haya hecho antes, asi que es una sorpresa.

Teary Eyes tiene esa misma onda que International Smile (de Prism, 2013), con el mismo ambiente discotequero y prendido y un ritmo progresivo, con tintes house por todos lados y una vibra que invita a ponerse de pie sobre la mesa del antro (o de tu casa) y bailar como idiota. La letra es una especie de plática con la desconocida del antro que está llorando en el baño, donde le dicen que siga la fiesta, aunque tenga los ojos llorosos y el rímel corrido. Total, el corazón ya está roto. Excelente tema.
 

Daisies viene a poner las cosas sobre la mesa, pues a pesar de ser corta, es la mejor canción del álbum. Escrita junto a Jon Bellion, uno de mis músicos favoritos (y que ya ha trabajado con Zedd) es el equivalente a Firework (Teenage Dream, 2010) y Unconditionally (Prism, 2013) en el nivel de epicidad y atmósfera envolvente. Es etérea, cercana al dream pop, con acordes de guitarra acústica y una letra  poderosa sobre el no rendirse ante la adversidad, no rendirse hasta que te cubran de margaritas (o sea, hasta que mueras). Es preciosa en toda la extensión de la palabra, con el mejor registro de voz de Kitty Kat. 
 
Zooey Deschanel interpretando a Katy Perry en el videoclip de Not the end of the World

Not the End of the World causó enojo entre los críticos en el contexto de la pandemia, pues la consideraron imprudente. Lo cierto es que es una canción interesante, la primera incursión de Katy en el trap. No dire mucho sobre ella, sino sobre su video musical, donde los aliens intentan capturar a Katy y destruir el planeta, pero accidentalmente se llevan a Zooey Deschanel, de quien llevamos años comentando el increíble parecido que tienen ellas dos. La idea es oro puro y me partí de risa cuando lo vi. Anyways, continuemos.

Smile es equivalente a Chained to the Rhythm (Witness, 2017), y en momentos suena a This is how we do (Prism, 2013), con trompetas sintéticas, aumentos en el bass a media canción y sonidos que evocan a los 90's, mientras canta sobre cómo volvió a sonreir, refiriéndose a ella misma como su yo 2.0, agradeciendo a Dios y diciendo que las lágrimas le dejaron buenas lecciones. Bueno, Russell Brand es un idiota, ¡que bueno que ya lo dejó atrás! Tercera mejor canción del álbum.

Tucked suena bastante a Part of me (Teenage Dream, 2010). Es sostenida casi en su totalidad por un arreglo de guitarra y múltiples pulsaciones musicales y música de viento bien discreta, mientras Katy canta sobre escapar con tu amor secreto a una isla donde nadie los vea. Bastante decente.
 

Only Love es la penúltima del álbum, y nos llega al corazón con una letra tan bonita y verdadera. ¿Qué haría si fuera a morir mañana? Llamar a mamá y decirle cuánto la quiero y la extraño, y una carta a papá escrita con el corazón. Dejar este mundo con el odio atrás y el amor por delante. Personalmente me puso a pensar en cómo desperdicio el poco tiempo que tengo de vida.
Musicalmente es equivalente a Double Rainbow (Prism, 2013), con influencias de bluegrass en los coros, bastante bien disfrazadas de electrónica, y con reminiscencias a CeeLo Green, con ecos vocales por doquier. Un temazo!

Cerramos con What Makes a Woman, una canción electroacústica. La letra es una contraparte de The Man, de The Killers (Wonderful, Wonderful, 2017), sobre lo que significa realmente ser una mujer y poder hacerlo todo, mientras cargas el peso del mundo sobre tus hombros. Musicalmente suena a Hey There Delilah de los Plain White T's (All That We Need, 2005), con una carga progresiva de tintes electrónicos y una voz magnífica, y una producción impecable. ¡Un cierre bastante impresionante!


Bien, después de escuchar el álbum (Más de diez veces en tres días) y hacer este pequeño análisis lírico y musical, y reconociendo a este álbum como el tercer mejor álbum de Katy, podemos llegar a esta calificación.

 
Es todo por el día de hoy. ¿Qué te pareció este álbum de Katy Perry? ¿Cuáles canciones te gustaron a tí? Cuéntamelo en los comentarios. Espero que tengas un día increíble desde donde sea que me estés leyendo. Nos leemos la próxima.
 
Fin de la transmisión

jueves, 17 de junio de 2021

In Your Own Times: ¿Who the hell is Olivia Rodrigo?

Olivia Rodrigo

Hola a todos, bienvenidos una vez más a In Your Own Times, donde escribo cuando se me ocurre o me nace hacerlo, como ha pasado en los últimos meses. Tenía tiempo sin sentarme a escribir nada. En noticias amables, finalmente terminé mis materias de la universidad. En noticias menos amables, aún no termino la carrera, es un poco desgastante esto, pero nos tocó la pandemia y a todos nos jodió, pues me retrasó un año.

En fin, no todos la pasaron taaan mal, y de hecho encontraron algo de inspiración (y algo de sentido a sus miserables vidas) en el encierro. Entre ellos están Taylor Swift, experta en capitalizar sus tragedias amorosas; Lana del Rey, que está por lanzar un álbum seis meses después del séptimo; Hayley Williams, con su FLOWERS FOR VASES/DESCANSOS, y alguien menos familiar, como lo es Olivia Rodrigo. Ahora te preguntarás lo mismo que muchos, ¿quién carajos es Olivia Rodrigo y de dónde diablos salió? Estoy aquí para hablar de ella y de su primer álbum de estudio.


Olivia Rodrigo, de Disney+ al éxito mundial

 

Es una cantante, compositora y actríz estadounidense. Ella es conocida, de primera mano, por ser protagonista de la serie de Disney+ High School Musical: The Musical: The Series. Antes de viralizarse por esa ridícula aplicación, ella protagonizó la serie, compuso algunas canciones del soundtrack, y al parecer, su voz y talento llamaron la atención de un productor, Dan Nigro, que contactó con ella al finalizar la emisión de la primera temporada. Luego vino todo el despelote de la pandemia y el encierro, y encontraron la forma de componer y grabar, de manera segura. El resultado: un álbum precioso, que combina canciones acústicas y a piano con power ballads, canciones post punk bastante enérgicas como Avril Lavigne y Paramore, pero sin caer en el melodrama de Lana del Rey, ni en la exageración ni el power de Dua Lipa. Es un álbum Gen Z en toda la extensión de la frase, y uno de los debuts más asombrosos que haya escuchado en mis 24 años de vida. ¿Será que viene a renovar esa onda pop punk femenina que tanto hace falta? Ya lo veremos.


SOUR, un análisis de lo mejor y lo que puede mejorar

Carátula de SOUR

Arriba mencioné un poco de la calidad de este pequeño álbum de 34 minutos de duración. Es actual, con historias de (Des)amor contemporáneas y frescas, un balance triple entre tres géneros y una onda bastante buena, de forma que ninguna canción se hace pesada, e incluso cuesta terminarlo todo de una vez, pues quieres repetir canciones. Es pop punk, en momentos tiene elementos country, en otros alguna power ballad con el piano protagonista, y en otros juega a ser Sía, en su álbum Colour The Small One, inclusive tiene influencias de Alanis Morissette. Su trabajo contiene muchas de las influencias de lo que yo escuchaba cuando estaba en la secundaria. En esos momentos ella tenía 7 años, así que son influencias con las que ella creció, y en el estudio las explotó de manera catárticay liberadora. Lana del Rey se sentiría orgullosa de su trabajo.

Las mejores

Vamos a empezar con brutal, una canción pop punk con unos tintes grunge sutiles y bien escondidos. Empieza con una sección de cuerdas muy lo fi, antes de explotar como Lithium de Nirvana, mientras se pregunta dónde carajos está el sueño adolescente del que tanto le hablaron. ¿Katy Perry, qué hiciste? Esto es un temazo.

En traitor ella canta al chico que la traicionó para correr a los brazos de otra, mientras una atmósfera melancólica suena, con coros angelicales, en un estilo cercano al dream pop, y en acompañamiento suena una guitarra acústica. Una de las mejores.

Carátula de driving license, primer single de SOUR
No saques tu licencia de conducir solo para ir a ver a tu novio (o lo que tengas), porque te pueden ilusionar a lo idiota. Driving License se viralizó en TikTok (doy gracias por no tener esa cosa aún) y así ella saltó a la fama. La canción es una balada triste a piano, pero un poco más vivaz que la canción anterior. Provoca querer ponerla on repeat hasta que los sesos se derritan y se escurran por los oídos. Su voz es preciosa y el coro es pegadizo. También es un temazo.

  
Taylor Swift y Jack Antonoff
Finalmente, su artista favorita, Taylor Swift, y el productor del momento, Jack Antonoff, trabajaron con ella en una canción, 1 step forward, 3 steps back. Es la canción más relajada del álbum. Un piano y una atmósfera campirana y boscosa caracterizan la canción. La letra es sobre avanzar un paso y retroceder tres al intentar superar a tu ex, pero ese tormento en la cabeza lo disfrutas de forma masoquista. ¡Que melodrama!

Carátula de deja vu, single de SOUR
 deja vu es una canción con tintes de Sia y una musicalización muy lo fi, que empieza tranquila, pero evoluciona en una canción pop punk poderosa, con elementos de Jimmy Eat World en su álbum Bleed American. Tenemos una base de xilófono que suena en toda la canción y una dedicatoria a tu ex, que tiene deja vu con su novia actual, recordando cosas que vivió contigo. ¡Excelente canción!

Good 4 U, uno de los singles de SOUR
 Good 4 U tiene una energía bastante marcada en el coro, y una onda muy Avril Lavigne de su album Let Go. Tiende al pop punk, con sus guitarras crujientes y momentos casi acapella, antes de explotar en el coro. La historia es básicamente ella llorando a su ex, mientras él se la pasa de lo lindo. Es un tema bastante destacable.

Enough for you parece ser un homenaje a su cantante favorita, Taylor Swift, y suena también a John Mayer. Es una canción con tintes country pop de principio a fin. La canción más triste del álbum, donde se siente culpable por no haber sido suficiente, a pesar de estar siempre y siempre cuidar de él. Su voz aúlla en culpa y brilla en toda su extensión.

Happier es una canción que tiende al soul, con un ritmo sostenido como una especie de blues, con el piano protagonista y una sección de cuerdas al fondo. Es similar a tell me it's over de Avril Lavigne y a Dive de Ed Sheeran. La historia, ella no lo supera y se siente egoísta al querer que él sea felíz, pero no como lo era con ella. La canción cuenta con el mejor registro de todo el álbum y tiene los elementos para ser la mejor canción del álbum, pero tiene mucha competencia.

Su crimen fue romperle el corazón y abandonarla en la escena. Favorite crime raya en el melodrama, pero también destacamos la canción como una balada triste, acústica y con unas vocales de las poderosas, al mero estilo de Hayley Williams, pero terminamos casi en seco. Punto en su contra, pero no es suficiente para acabar con los otros puntos a su favor.

Hope ur ok podría ser la historia de la superación, al ser la canción final, pero no lo es. Es una especie de himno, aunque no cumple con el requisito, pero narra situaciones difíciles de adolescentes viviendo una pesadilla en su hogar, como la que crió sola a sus hermanos, el chico de los padres religiosos y abusivos. En la canción ella los felicita por haber salido de esas ataduras y haberse deshecho del resentimiento para hacer una vida sin todo lo que sufrieron. Es una canción agria, bien compuesta, aún sin ser ese final épico que todos esperaban.


Bien, ahora tienes la respuesta de porqué todo el mundo dice que hay una canción de Olivia Rodrigo que lo explica, cuando hablan de cualquier situación, y después de analizar todo el álbum y darte las mejores canciones, puedo decir que, aunque las letras son muy adolescentes, la composición, la producción y las voces son impresionantes. Mi calificación es ésta:


Eso es todo por hoy. Si te gustó el post, compártelo en tus redes o muéstraselo a tus amigos. Puedes dejar tu comentario en la parte de abajo. Nos leemos la próxima.

Fin de la transmisión


 

sábado, 20 de febrero de 2021

In Your Own Times: las 7 mejores canciones de Jesse&Joy


Hola a todos, bienvenidos a otro post en este espacio, que este humilde desempleado ha tenido la desfachatez de tener abandonado, pero aquí seguimos.

La cuarentena (que ya casi cumple un año) nos ha tenido ocupados a todos en la casa, y eso implica tener bloqueos creativos, pero siempre hay algo que inspira a hacer cosas grandes, o no tanto. Entre las cosas que no suelo escribir aquí se encuentra la música en español, pues últimamente casi todo es reggaetón, bastante vulgar, a decir verdad, pero hay artistas en mi país, México, que componen bastante bien, y entre ellos está Ximena Sariñana, Natalia Lafourcade, Siddhartha, Zoé y, por supuesto, Jesse & Joy. Todos tienen su sello característico, y estos últimos son de quienes hablaremos aquí.

Si no me equivoco, tienen ya cinco álbumes de estudio, el más reciente salió a media contingencia unos meses atrás, y con eso es más que suficiente para armar un buen ranking, limitándonos a 7 de sus mejores creaciones para no hacer tan largo este post. El título se lee con voz de Dross Rotzank, así que estas son las 7 mejores canciones de Jesse & Joy.

7. Electricidad (Del álbum Electricidad, del 2009)


Sin grandilocuencias, esta canción tiene un toque rock pop y un tempo acelerado, no tan común en sus canciones, y con influencias del rock español. Para ser apenas su segundo trabajo es una excelente canción, pero esto apenas empieza. Una buena dedicatoria, un tanto melosa, pero pareciera que nos preparaban para el drama de sus álbumes posteriores.



6. Tanto (feat. Luis Fonsi) (Del álbum Aire, de 2020)


Esta canción estaba destinada a ser un hit instantáneo. No cuenta con grandes dramas ni historias profundas, y es una de las buenas colaboraciones que tienen con otros artistas. Luis Fonsi estaba de sobra, teniendo la voz de Jesse, aunque sonaría incorrecto que dos hermanos cantaran una canción así. Tiene una especie de base de trap y un ritmo tranquilo, acompañado de ecos atmosféricos y acordes discretos de guitarra, que se funden en conjunto hacia el bridge, rompiendo de manera abrumadora. No le hagan caso a la letra, a Joy sí se le da hablar de sentimientos.


5. Dónde está el amor (Del álbum Tanto de Pablo Alborán, de 2013)
Esta canción es magia pura, la química de Pablo y Joy es innegable. Los estilos de ambas partes de la canción son tan compatibles que estallan en una canción más que romántica. El juego de voces está envuelto en sonidos de guitarra electroacústica y un rico piano apenas perceptible acompaña todo el conjunto. La letra es sobre amor, sin rayar en la miel y sin empalagar. Casualmente ni siquiera es su mejor canción, pero sería un desperdicio dejarla fuera de este top. Todo en ella encaja a la perfección, sin tener sensación de tiempo faltante o excesivo.

4. La de la mala suerte (del álbum ¿Con quién se queda el perro? del 2011)


Siempre he dicho que este es el mejor álbum de su carrera. Son ellos en toda su expresión, y el álbum es conceptual en mi opinión, pero para entenderlo tendrás que escucharlo de atrás para adelante. Empezamos queriendo enamorarnos y acabamos separados, viviendo solos y en aprietos con la renta. Pues esta canción se encuentra justo a la mitad, donde la relación se está cayendo a pedazos y empiezas a hacer de todo para salvarla.
Tiene de todo, desde guitarra, voces magníficas, una letra desgarradora para llorar hasta llevar a los ojos a la desertificación absoluta. Incorpora secciones de cuerdas que le otorgan mayor volumen, sin romper la sensibilidad que acompaña a Joy mientras canta.
Existen dos versiones: la versión estándar y otra donde colaboran con Pablo Alborán.

3. Un Besito Más (feat. Juan Luis Guerra, del álbum Un Besito Más, de 2015)


Esta canción le rompería el corazón a cualquiera. El sonido es tropical, cercano al merengue, pero la alegría no se encuentra en ningún momento. La canción es sobre irse de donde vives para buscar una mejor oportunidad de vida, dejando atrás a los seres más queridos, y por ello tiene un peso emocional mayor. La voz de Juan Luis Guerra no aporta mucho, es casi imperceptible, pero no entorpece ni le quita magia a la canción. Por algo se encuentra aquí arriba, y es por todo lo que hace sentir, pues derrite el corazón de cualquiera con la combinación de todos sus elementos. Y por ello es el segundo mejor álbum que tienen. Un temazo.


2. ¡Corre! (del álbum ¿Con quién se queda el perro? de 2011)
De sobra es la canción más conocida del dúo. La versión del videoclip es más larga y está más completa con ese intro de piano que viene a poner todo en perspectiva. Es lo que obtenemos al sentar a Jesse al piano, pues sus dedos se encargan de crear estas canciones. Con Joy sentada a la guitarra, mientras canta el penúltimo tramo del álbum, antes de que suelten al perro y se separen para siempre, según la lógica que planteé previamente, tenemos un himno a la ruptura total. Fue producida por Martin Terefe y grabada en Londres, y por ello tenemos una reminiscencia al Moon Landing de James Blunt, con un sonido más europeo a lo acostumbrado hasta ese entonces. Tiene un tempo allegro y unos acordes que se funden hacía el final, donde el piano termina con una voz queda. Las gotitas de amor de la canción anterior fueron en vano, el amor se acabó, pero esta balada queda en segundo lugar. ¿Qué será más impresionante?




Menciones Honoríficas
No podíamos dejar todo aquí, pues tenemos varias menciones extra para completar la lista:
  • Llorar (feat. Mario Domm, del álbum ¿Con quién se queda el perro? de 2011)
La canción suena más a Camila por razones de su colaboración, pero envuelta en drama, un mar de llanto y sin un rayo de esperanza. Fácilmente pudo entrar en el top 7, pero se quedó en esta sección.
  • Valió la pena (del álbum Aire, del 2020)
Una de las pocas canciones que tienen a Jesse como voz principal. Para empezar, su voz es deliciosa, y con pocos elementos, principalmente acústicos, y una letra sin exageraciones, pero que deja con ganas de escucharla en repetición.
  • Espacio Sideral (del álbum Esta Es Mi Vida, del 2006)
Esta canción fue su primer hit, es divertida, romántica y con un sonido fresco. Por ella es que aún los tenemos y han llegado hasta donde se encuentran el día de hoy. Es progresiva y acompañada de acordes acústicos, que se absorben y se funden en una aventura donde declaras tu amor en una escena divertida. Difícilmente excluible de esta lista, pero es un temazo.
  • 3 A.M. (feat. Tommy Torres, del álbum Un Besito Más, de 2015)
La última mención honorífica del post, y raya esta sección por el ritmo fiestero y tropical que tiene, dada la presencia de Tommy Torres. Saliendo del drama convencional y dándole un giro provechoso que asegura el éxito de la noche.


1. Ecos de Amor (del álbum Un Besito Más, de 2015)
La joya de la corona, la mejor canción y una de las mejores composiciones que yo conozco. Fue lanzada como primer single de este álbum. Para empezar a describirla tenemos que empezar por el piano que la acompaña, que parece tragado por un vórtice de desasosiego y una pérdida de la esperanza en lo más plausible a la memoria de un amor destrozado y un abandono constante. Es aderezada por una sección de cuerdas mientras Joy canta ahogada en una atmósfera que va más allá de lo que una persona puede describir como sentimiento. La música se encarga de hacer escuchar la intranquilidad en su máxima expresión.
Probablemente su único defecto es su duración, pues con 3:35 deja esa sensación de querer que no acabe, al igual que su compañera que se quedó con la medalla de plata.


Bien, esto fue todo por este post. ¿Qué canción agregarías o cuál dejaría en la cima? ¿Te gustó este top? Escríbelo en los comentarios.

Nos leemos la próxima.

Fin de la transmisión